jueves, 17 de julio de 2008

precursores

vicente aguilar bustamante


Nació en la ciudad de San Salvador, el 5 de abril de 1746, como fruto matrimonial de Isabel de Bustamante y Nava (1716-7.febrero.1800) y del capitán Manuel Aguilar y de León (1710-1772), primo hermano del presbítero y doctor José Matías Delgado.
Además de los otros dos futuros sacerdotes y próceres independentistas, Nicolás y Manuel, este matrimonio también fue el origen de Ana Petrona y Mónica, quienes años más tarde contrajeron respectivas nupcias con Domingo Antonio de Lara y Mongrovejo y Francisco Durán. Ana Petrona falleció en noviembre de 1784 y su esposo la siguió a la eternidad en enero de 1797. Su gesta libertadora fue continuada entonces por sus hijos Mariano Antonio (¿Cuscatancingo?, febrero de 1774-¿Olocuilta?, 13.agosto.1843), Antonia Inés (¿?-marzo.1844. En 1800 contrajo matrimonio con el coronel, alférez real, corregidor y alcalde vicentino Rafael de Molina y Cañas) y Domingo Antonio.
La residencia de la familia Aguilar y de Bustamante se localizaba en la esquina sureste de la Plaza de Armas de San Salvador (hoy Parque Libertad), donde décadas más tarde fueron construidos, en forma sucesiva, el Palacio del Ejecutivo (llamado Casa Blanca, 1866) y los cines Popular y Libertad.
Vicente siguió los pasos educativos de su hermano Nicolás e ingresó como estudiante en el afamado colegio de San Francisco de Borja (Antigua Guatemala), donde fue ordenado diácono (1 de junio de 1776) y presbítero (21 de diciembre de 1776). Durante 22 años tuvo a su cargo los curatos de Suchitoto, Tonacatepeque, Cojutepeque, Zacatecoluca, San Pedro Perulapán (1798), San Martín, Tenancingo y otros, además de que fue coadjutor de las parroquias del Sagrario en las ciudades de Guatemala y San Salvador.
Aunque de avanzadas edades, junto con sus hermanos tomaron parte activa en la gesta libertaria del 5 de noviembre de 1811. Fracasado este primer movimiento emancipador, Vicente fue despojado de la vicaría. Luego del segundo intento insurreccional de enero de 1814, a su hermano Nicolás y a él, que ya para esos momentos se encontraba ciego, se les confinó en su hacienda familiar "Toma de agua" (Quezaltepeque), a partir del 2 de abril de 1814.
Falleció en ese lugar de reclusión, el 17 de enero de 1818. Trasladado a San Salvador para el reconocimiento legal, fue sepultado en la Iglesia Parroquial (hoy Iglesia del Rosario).
Como homenaje para él y sus hermanos próceres, un errado decreto legislativo del 23 de junio de 1932 ordenó que los cantones La Toma, Las Tunas, Santa Lucía, Pishishapa, Piñalitos, Los Mangos, La Florida y El Llano fueran segregados del pueblo de El Paisnal, al norte del departamento de San Salvador, y que con ellos fuera fundado el pueblo de Aguilares, que después llegó a ser villa (30 de septiembre de 1946) y ciudad (25 de diciembre de 1971).

manuel aguilar bustamante


Nació en la ciudad de San Salvador, el 26 de junio de 1750, como uno de los hijos menores de Isabel de Bustamante y Nava (1716-7.febrero.1800) y del capitán Manuel Aguilar y de León (1710-1772), primo hermano del presbítero y doctor José Matías Delgado.
Además de los otros dos futuros sacerdotes y próceres independentistas, Nicolás y Vicente, este matrimonio también fue el origen de Ana Petrona y Mónica, quienes años más tarde contrajeron respectivas nupcias con Domingo Antonio de Lara y Mongrovejo y Francisco Durán. Su hermana Ana Petrona falleció en noviembre de 1784 y su esposo la siguió a la eternidad en enero de 1797. Su gesta libertadora fue continuada entonces por sus hijos Mariano Antonio (¿Cuscatancingo?, febrero de 1774-¿Olocuilta?, 13.agosto.1843), Antonia Inés (¿?-marzo.1844. En 1800 contrajo matrimonio con el coronel, alférez real, corregidor y alcalde vicentino Rafael de Molina y Cañas) y Domingo Antonio.
La residencia de la familia Aguilar y de Bustamante se localizaba en la esquina sureste de la Plaza de Armas de San Salvador (hoy Parque Libertad). Tras la muerte de Manuel y en cumplimiento de su testamento, la casa fue traspasada a su primo, el presbítero Juan José de Arce. Después, pasó a manos fiscales y estatales, por lo que en su predio fueron construidos, en forma sucesiva, el Palacio del Ejecutivo (llamado Casa Blanca, 1866) y los cines Popular y Libertad.
En 1761, ingresó como estudiante en el afamado colegio de San Francisco de Borja (Antigua Guatemala).en 1761 y se bachilleró en Filosofía el 17 de febrero de 1772. Recibió su tonsura y las órdenes menores del Colegio Tridentino en la iglesia del convento de Capuchinas. El 13 de marzo de 1776 recibió los grados de exorcitado y acolitado, para después obtener el subdiaconado (20 de septiembre de 1776), diaconado (sábado 4 de abril de 1778, en la iglesia del convento de la Concepción) y presbiteriado (13 de junio de 1778, con ceremonia en la iglesia del convento de Santa Catalina). Después fungiría como encargado del curato de Zacatecoluca.
Se desempeñó durante años como catedrático de Filosofía y Cánones en el Seminario Tridentino de Antigua Guatemala. Aquejado por grave enfermedad en septiembre de 1788, al mes siguiente retornó a San Salvador y acompañó a su sobrino Mariano Antonio de Lara en la rectoría de la Parroquia de Santa Lucía Zacatecoluca (1790-1801). Después, ejerció el curato en esta población desde junio de 1803 hasta mediados de 1808, cuando fue nombrado rector de su antiguo colegio guatemalteco. En 1809, fue designado capellán del convento de las Carmelitas.
Aunque de avanzadas edades, con sus hermanos tomó parte activa en la gesta libertaria del 5 de noviembre de 1811. Fracasado el movimiento emancipador, fue encarcelado desde octubre de 1811 hasta el 4 de marzo de 1813. Luego del segundo intento insurreccional de enero de 1814, escapó de San Salvador en la noche del 2 de marzo y una semana más tarde, al llegar a la antigua ciudad capital de la Capitanía General, se le ordenó reconcentrarse y fue reducido a prisión en el hospital de San Pedro y en el Colegio de Cristo.
Pasó sus últimos años en la ciudad de Antigua Guatemala, en la casa de María Antonia Córdoba de Brito, una amiga de sus hermanas. Ante los oficios del escribano José Inocente Calderón de la Barca firmó su testamento el 6 de febrero de 1819 y lo enmendó y renovó el 4 de marzo del mismo año. Falleció a las trece horas del sábado 25 de mayo de 1819 y fue sepultado en la tarde del día siguiente, en una ahora olvidada tumba de la Parroquia de San Sebastián.
Como homenaje a él y a sus hermanos próceres, un errado decreto legislativo del 23 de junio de 1932 ordenó que los cantones La Toma, Las Tunas, Santa Lucía, Pishishapa, Piñalitos, Los Mangos, La Florida y El Llano fueran segregados del pueblo de El Paisnal, al norte del departamento de San Salvador, y que con ellos fuera fundado el pueblo de Aguilares, que después llegó a ser villa (30 de septiembre de 1946) y ciudad (25 de diciembre de 1971).

pedro pablo castillo


El barrio de Candelaria, al sur de la ciudad de San Salvador, fue el escenario en el que, el 29 de julio de 1780, vino al mundo el más humilde los próceres centroamericanos: Pedro Pablo Castillo.
Cohetero de oficio, en 1805 contrajo nupcias con Francisca Alegría Aquino, con quien procreó cuatro hijos. Residieron por algún tiempo en Cojutepeque y en el barrio capitalino de La Merced, donde el fogoso artesano se involucró de lleno en el movimiento popular del 5 de noviembre de 1811. El fracaso político de esa intentona no disminuyó en él su espíritu independentista.
Electo alcalde segundo de San Salvador, junto con el alcalde primero Juan Manuel Rodríguez potenciaron un nuevo intento insurreccional el 24 de enero de 1814, en el que Castillo fue señalado por las autoridades españolas como "el principal autor de la infame insurrección".
Castillo, al frente de unos 150 patriotas, ocupó la Parroquia de San Francisco (hoy Mercado ExCuartel) y desde allí opuso resistencia militar a las tropas españolas que intentaban sofocar la revuelta. Batido en duelo con el jefe militar español Zaldaña, logró superar la lucha desigual y lo mató. Por esta razón, las autoridades le pusieron precio a su cabeza, una vez que el nuevo intento independentista fue sofocado y sus promotores fueron reducidos a prisión.
Refugiado en la Iglesia Parroquial de San Salvador (ahora Iglesia del Rosario), fue protegido allí por uno de los presbíteros Aguilar, quien lo ayudó a ponerse una de sus sotanas y a montar en su propio caballo.
En la tarde del día 25, la orden de arresto en su contra fue publicada por bando militar en las cuatro esquinas de la Plaza Mayor de San Salvador (ahora Plaza Libertad) y fue despachada por cordillera hacia San Vicente, San Miguel, Suchitoto, Chalatenango, Zacatecoluca, Usulután y Santa Ana.
Enterado de que las autoridades habían establecido una recompensa de 500 pesos por su captura, se trasladó por pocos días a una propiedad que poseía en la jurisdicción de Huizúcar. Mientras tanto, su casa, muebles y demás bienes fueron destruidos o incautados por furiosas turbas proespañolas, las que también lanzaron a la calle a su esposa y vástagos. Poco menos de un año más tarde, Francisca de Castillo murió de fiebre puerperal, tras dar a luz a su quinto descendiente.
La tradición cuenta que el prócer se marchó hasta Omoa, en la costa caribeña de Honduras, se trasladó luego a Belice y después viajó a la isla de Jamaica, en donde adoptó el pseudónimo de Juan Sánchez y murió el 14 de agosto de 1817. Sobre estos últimos hechos biográficos no se cuenta con documentación histórica verificable, pese a las gestiones realizadas en los últimos cincuenta años por el Ateneo de El Salvador y la Academia Salvadoreña de la Historia.
Pedro Pablo Castillo fue padre de León Castillo, quien heredó de él la entrega por las causas populares, por lo que desempeñó importantes trabajos gubernamentales y militares al lado del general Francisco Morazán. Ya de edad avanzada, el hijo del prócer ingresó a la Orden de los Carmelitas y fue gracias a sus esfuerzos que se construyó en la ciudad de Santa Tecla la primera Iglesia de Belén, dedicada originalmente a la Señora del Carmen, construida a partir de 1857 y estrenada el 1 de abril de 1862. En la actualidad, solo existe parte de la puerta principal de dicho templo católico, encerrada al norte del gimnasio del colegio femenino Belén.